Un mar de olivos
¡Tú! Lo que verdaderamente nos hace únicos
Pagos de Navalta; una firma familiar originaria de la provincia de Toledo, en el corazón de los Montes de Toledo cuya misión, valores y visión se fundamenta en el compromiso, prontitud, transparencia, calidad y cercanía. Un olivar en el que cada árbol es una ilusión, y cada aceituna una lágrima de oro líquido para tu mesa. Sostenibilidad y calidad, nuestra razón de ser para que el producto tradicional por antonomasia de la alimentación y gastronomía mediterránea llegue a tu hogar para disfrutar el auténtico zumo natural de aceituna; Aceite de Oliva Virgen Extra en estado puro.
Comprometidos en las prácticas agrícolas, de producción y de calidad exigentes. AOVE de cosecha temprana de aceituna, que pone de manifiesto la calidad y el rendimiento del fruto. Producto y etiquetado que representa nuestros valores; la artesanía del auténtico zumo de aceituna y lo tradicional se pone al servicio de la vanguardia e innovación. Control de maduración y estricta mesa de selección para que disfrutes de la pureza del más exquisito aceite de oliva virgen extra.






Paraíso de la cultura y plantación del olivo desde hace siglos, que remonta su actividad olivarera desde la Edad Media hasta nuestros días.
El árbol de la cultura mediterránea; el olivo. Una zona autóctona de espectacular microclima que desde hace siglos corona la variedad de aceituna Cornicabra siguiéndole de Picual. Ejemplo, cariño y saber hacer; un legado que nos dejan nuestros antepasados para rendir tributo a su esfuerzo y dedicación hacia el más absoluto respeto a la familia y a nuestra gastronomía. Tradición, simbolismo y vanguardia que hace brotar de la madre tierra un aceite de oliva virgen extra único y exigente, que rinde homenaje a la cultura de nuestra gastronomía.
Pagos de Navalta, un terruño al más puro estilo terroir francés; la viticultura de precisión traducida a la cultura del olivo. Selección de las óptimas plantas de olivo de Picual y Cornicabra que abrazan, en menor medida, a una representación de la flora faunística de variedades foráneas de la península ibérica como son Gordal Sevillana, Cornicabra, Cobrançosa y Blanqueta. De su fruto se obtienen monovarietales de Picual y Cornicabra cuyo blend aromático configura un aceite floral vivo, de máxima expresión y de excepcionales cualidades y propiedades organolépticas y nutricionales. Un virgen extra amargo, frutado y picante; un AOVE puro.

Granito

Caliza

Arcilla calcárea

El olivo
Una zona característica por un clima mediterráneo continental. Inviernos fríos y húmedos, marcados por lapsos de tiempo soleados y secos; veranos secos de escasa lluvia y altas temperaturas. Un microclima perfecto, entre las minerales e imperiosas aguas del río Tajo y los bravíos Montes de Toledo, para el cultivo de la cultura del olivo. Suelos arcillosos con estratos calcáreos, incesante losa de granito en las profundidades que mantienen con frescura las raíces del olivo, favoreciendo la ingesta óptima de minerales y nutrientes del árbol. El clima y las condiciones edafológicas, propician el excelente cultivo del olivo, cuya evolución natural ha conseguido una perfecta adaptación al entorno desde siglos atrás.
Arropado de encinas, espinos, almendros, jaras y zarzas, nuestros olivos configuran una sensación aromática excelente que se transmite desde la tierra hasta la aceituna, y de ésta al aceite natural extraído. Oro líquido, la esencia de la vida que brota de las verdes lágrimas del olivo.

Zorzales, paloma torcaz, tórtola, perdiz, codorniz, abubilla, faisán, búho real, mochuelo, carabo, águila

conejo, liebre, zorro, jabalí, corzo, ciervo

Encina, alcornoque, romero, espárrago, espliego, tomillo, jara, manzanilla, almendro
